7.18.2011

Eufenismos

no te puedes imaginar cómo me altera, cómo me alegra, cómo me deshace eso que dices de un dulce que extraña tu boca....
con tal de que te acuerdes de mí y sigas deseando el dulce que te tengo. Ya veras en qué buenas condiciones. Te voy a endulzar la cara, los oídoss, la boca. Y voy a beber de tu miel, también, bajo tu lengua, entre tu carne apretada y escondida.
20 de enero de 1950

¿Ya no tienes ganas.. de nada? ¿No te da lástima el pobre Jaime? ¿No quisieras el dulce que te doy siempre? ¿No me darías de tu veneno?
17 de octubre del 51

Me da gusto que tengas ganas de darle una probadita al dulce y te aseguro que te lo estoy guardando para diciembre. A mí me encantaría también.
15 de noviembre del 51

Te pertenezco totalmente... En lo único que yo voy a mandar, será en los besos que te daré, en las caricias que no podrás evitar. Aquí vas a ser obediente y te vas a dejar matar pot mí, porque te voy a deshacer, ya verás.... Te sé de memoria, y te repaso diariamente, con miss ojos cerrados, con mi boca, con mis manos, con mi cuerpo todo, con cada célula. Necesito olerte, gustarte, verte, tocarte, oírte. ¡Si supieran cómo está el dulce necesitado de tí! (Te voy a llenar la boca mil vecess, y los oídos, y el cuello, y los ojos. Todo lo que quieras. Lo deseo, lo quiero, es urgente).
28 de noviembre del 51

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