(él) dijo que con aquella ropa iba a ser la muchacha más atractiva de Acapulco, que le auguraa un éxito bárbaro, que los turístas americanos sin duda enloquecerían por ella.
-¿Tú crees? - le preguntó con ingenuidad
-Sí, todos querrán acostarse contigo, y tú querrás acostarte con varios de ellos.
Fue el comienzo del fin.
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